On writing, Stephen King, 2002. Pocket Books.
Mientras escribo es una especie de autobiografía literaria. Stephen King se dedica a dar cuenta de episodios de su infancia que fueron -o que él cree que fueron- determinantes en su vida como escritor y después avanza hacia el terreno de la escritura: el qué, el cómo, el cuándo, el qué tema y de qué forma.
Me lo recomendaron más de una vez y, después de los libros geniales sobre escritura que leí el año pasado, imané que este iba a seguir en la línea de los anteriores. No me equivoqué.
El libro es una ficción en sí mismo. Es la historia de Stephen King personaje-escritor, narrada por un Stephen King actual que ya conoce a sus personajes y sabe dónde están sus características. Cada episodio es una delicia bien narrada que crea una atmósfera anecdótica y para nada melancólica -quizás en algún episodio pero, en general, la línea que subyace es la del humor y la autocrítica.
El camino que traza libro para llegar a los consejos más prácticos sobre escritura pone
en el centro la noción central de King: un escritor no se nace ni se hace, se vive. Aquel que disfruta de escribir y está dispuesto a dedicarle gran parte de su vida, su imaginación, y es capaz de hacerlo con honestidad, es un escritor.
Stephen King es claro y rápido para llegar al centro de la cuestión: no hay secretos ni fórmulas mágicas para la escritura (y a mí se me viene una frase de Hemingway que creo que resume lo que King quiere transmitir: "There is nothing to writing. All you do is sit down at a typewriter and bleed"). No obstante, es conciso y generoso a la hora de dar consejos basados en sus experiencias como escritor. Hay muchas ideas dando vueltas en el libro y, sobre todo, mucha pasión.
Mientras escribo tiene eso en el medio, dándole vueltas y dándole vida: pasión. Stephen King transmite su amor puro por la escritura y por el arte de crear y conocer personajes. Es crudo y directo, y no se guarda ningún comentario (incluso critica libros e ideas comunes sobre la escritura), pero siempre aclara que todo sale desde lo que él conoce y lo que él sabe que le sirve para escribir.
Stephen King narra una historia -su historia- y se esfuerza por transmitir el amor por las letras y los libros. Mientras escribo es una lectura motivadora y sumamente sincera que entusiasma.